"Pandemonio, es una ciudad en la que deambulan Las Voces y en la que se aguarda eternamente al huésped, sea digno o indigno, sea bueno o malo. En su interior apretujados caídos revolotean en una sola carne, dispuestos a saltar al primer navío disponible, como una fuga de agua caliente.
Solo tendrás un segundo para decidir: Leer el Manual de la Naturaleza Doble, y dar la vida; o ser otro para siempre" El capitánTulik; José R. García.

viernes, julio 10, 2009

Editorial? Julio 2009

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De nuevo en PortalPandemonio!... en realidad hace un tiempo que volví a publicar, pero he esperado a terminar la carga académica del tercer ciclo de la universidad para dirigirme hacia todos los pandemoadictos. Este blog ha nacido si mas no recuerdo a inicios del año pasado...o algo por el estilo, mi memoria nunca ha sido buena... ha sufrido remodelaciones cada cierto tiempo, amenazas de ya no volver a abrirse, etc. Este año 2009 ha sido un año más estable para este blogger, a fines del 2008 entré en una crisis de sentimentalitis aguda, pero bueno, esos tiempos ya pasaron; ahora estoy dispuesto a continuar el proyecto ( gritos de ultratumba de fondo) .. y espero que junto a mí disfruten de este blog que vuelve a joderles la vida como en su época de oro lo supo hacer. Saludos y "bienvenidos al Pandemonio!"

ElEditor....osea yo.... es decir Knockout.... mejor dicho... José Ricardo..bla bla bla

Revelación

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Medianoche ruidosa, Esteban se retira de una fiesta inconclusa, insatisfecho y odiando el descuido que trae a colación el consumo dañino del tiempo; se despide con un gesto nazi de aquellas marionetas desparramadas en el loby y con el último aliento; para no desistir del escape, posa los ojos en su amiga (atractiva cuando el maquillaje está seco y no "danza" entre despojos),y dá el último y autoconclusivo repaso. Está harto.

Se coloca el casco y arranca con furia, su cuerpo se contorsiona entre el acero en el preludio orgiástico que anuncia un momento libre de otros momentos.
Termina el falso viaje que promete el olvido. Reflexiona y entiende que aún si abandonase el recuerdo, el problema no hallaría solución, pues siempre quedaría algo que olvidar y para sobrevivir se necesita recordar ciertas cuestiones. Si fuese posible, nos comportaríamos como idiotas.

Pero no desiste, las luces se mezclan en ráfagas, todas las formas se simplifican ante la percepción de sus ojos. Esteban aún es conciente de su pensar; imágenes ajenas se proyectan... ése es el problema; convencido, acciona el acelerador, los vehículos son esquivados por mera suerte y el miedo se activa y fluye por primera vez con tanto ímpetu, llega rápidamente al límite y estalla... se simula menos actividad cerebral, Esteban experimenta unas maravillosas descargas y ....

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El roce con otro vehículo lo despierta de aquel trance, de nuevo prisionero de su conciencia. No se ha lesionado, pero ha estado muy cerca de fracturarse un hueso, y muchísimo más cerca de perder la vida, si es que se puede perder algo como eso.

Conduce con calma hasta su departamento, ha sido un día extrañísimo que, como todo acontecimiento extraño, uno nunca espera. Su motocicleta está en buen estado y el combustible no está ni a un 50 porciento... pero su aliento, el frío del temor lo han entorpecido. Ha entendido por fín lo que se necesita para alcanzar aquel nivel, pero su cuerpo está ahora tembloroso.

Sube de nuevo al vehículo sin darle vueltas al asunto, mueve las muñecas y dá rienda suelta a aquella bestia metálica. No hay que pensarlo, nunca más; acelera al tope, los carros son solo ráfagas y al instante todo es un haz de luz; los sonidos se fusionan en uno solo, todo es una masa y luego se pierde la conexión con la vaguedad misma.... Esteban siente las descargas!, se desconecta, pero ahora nada lo detiene, está en una carretera vacía.......

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Su amiga es la primera en encontrar algo, que por la ropa debería ser él, hace señas al resto de familiares que se encontraban detrás de ella buscando entre unos arbustos; Esteban yacía a un lado de la pista, extrañamente ileso.

-Esteban! despierta!

Aquella masa se retorcía, convulsionaba y luego, de un momento a otro, se incorpora del suelo... su expresión era la más espantosa
que algún humano hubiese logrado imaginar... totalmente ajena a esta realidad, y no hay nada más temible que algo ajeno a nuestro mundo; saltaba, aullaba, movía los brazos de forma desordenada...

La motocicleta se había destrozado y se hallaba a una distancia considerable de aquel engendro ante el cuál ni la madre, ni el padre, ni los amigos, pudieron reaccionar.

Esteban lo había logrado, había alcanzado quel nivel añorado... pero, acaso eso no era solo una curiosa e inédita forma de suicidio?