"Pandemonio, es una ciudad en la que deambulan Las Voces y en la que se aguarda eternamente al huésped, sea digno o indigno, sea bueno o malo. En su interior apretujados caídos revolotean en una sola carne, dispuestos a saltar al primer navío disponible, como una fuga de agua caliente.
Solo tendrás un segundo para decidir: Leer el Manual de la Naturaleza Doble, y dar la vida; o ser otro para siempre" El capitánTulik; José R. García.

sábado, abril 09, 2011

Heráclito

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En Éfeso, hace un tiempo indeterminado, la naración del mundo fue naturalmente escuchada y entendida a través de la intuición de un hombre. Los portadores de almas grandes, que separaban, distinguían y aguzaban, prontamente fueron acechados por el acceso primitivo y fresco de un hermoso Heráclito, que rechazaba métodos meramente lógicos, se levantaba en un salto acuático, y se incendiaba en un fuerte vapor.

Tan extraño se traduce entonces el que comprende el Logos de todas las cosas, pues ya muchos despiertos han afirmado, y con  razón, que las personas corrientes escuchan pero son como sordas, ven y es como si estuviesen ciegas. Las impresiones posibles mediante los sentidos están presentes entre los que rodean al sabio del devenir, pero solo el sabio puede descifrar y leer el mensaje inscrito. Heráclito se molesta en trazar, sorprender y dibujar a la naturaleza pensando, que gusta de esconderse, de ser incompatible con la facilidad a la idiotez humana.

Para saciar su descubrimiento, investido por el misticismo del Oráculo, la inspiración del inconciente, el silencio; Heráclito comienza a escribir poseso, contactando con ecos Orientales y culturas de madre tierra. El estilo matemático, la argumentación de telarañas lógicas, resultan medios inútiles para una labor que sobrepasa el mero raciocinio. Los aforismos, juegos del lenguaje, los alientos poéticos se presentan como solución y fluyen en un río "Sobre la Naturaleza" que estalla en cada curva y salpica hasta nuestros días. Más allá de las afirmaciones de Diógenes Laercio, el conjunto de aforismos puede dividirse en tres grupos: "Cosmogonía", "Política" y "Teología".