"Pandemonio, es una ciudad en la que deambulan Las Voces y en la que se aguarda eternamente al huésped, sea digno o indigno, sea bueno o malo. En su interior apretujados caídos revolotean en una sola carne, dispuestos a saltar al primer navío disponible, como una fuga de agua caliente.
Solo tendrás un segundo para decidir: Leer el Manual de la Naturaleza Doble, y dar la vida; o ser otro para siempre" El capitánTulik; José R. García.

martes, septiembre 08, 2009

Libro I - Ética Nicomáquea [Ficha]

Resumen


Aristóletes identifica bien con fin, siendo el primero, hacia lo que toda cosa tiende. Sin embargo hay diferentes clases de bienes; Aristóteles resalta que existen bienes que se subordinan o subordinan a otros, y que el bien supremo debe ser aquel que sea un fin por sí mismo.

Aristóteles expone que todos están de acuerdo con que el bien supremo es la felicidad, el problema surge en determinar qué es concretamente lo que llamamos felicidad en cuanto a bien supremo, puesto que se formulan tres formas de vida feliz; una vinculada la vida placentera, otra a la vida política; y una a la vida contemplativa, de estas tres las dos primeras las descarta puesto que no son un fin en sí mismas, sino que buscan la felicidad mediante ellas. Aristóteles plantea que para responder esta cuestión se debe de partir de las capacidades y actividades que solo son propias del hombre, y lo especifico del hombre es la capacidad de razonar, tras esto, Aristóteles formula que solo la actividad contemplativa puede acarrear la felicidad. Cabe resaltar que para Aristóteles la política es la ciencia que se debe de encargar de la felicidad, puesto que de ella se ramifican las otras ciencias, las cuáles tienden hacia la felicidad.

Aristóteles define las virtudes como hábitos que consisten en un término medio entre dos vicios, por exceso o por defecto, relativo a nosotros; y distingue entre virtudes dianoéticas, relacionadas al entendimiento; y virtudes éticas, relacionadas a encaminar las acciones del ser humano. Para acceder a la felicidad, el hombre primero debe de comportarse en relación a las virtudes y solo por medio de ellas podrá vivir una vida feliz. Ahora, si ser feliz es vivir acorde a las virtudes, la felicidad más alta es la vinculada a nuestra virtud más alta, que es la inteligencia.


Comentario Crítico

Aristóteles en su Ética Nicomáquea desarrolla coherentemente sus ideas, primero plantea el problema central, luego trata de definir ciertos términos básicos, y finalmente, mediante el uso de argumentos completamente válidos intenta defender una determinada postura. Usa ejemplos para el mayor entendimiento del lector. Sin embargo deja de lado temas de importancia por conveniencia.

Una crítica que puedo perfilar sobre el planteamiento de Aristóteles esta vinculada con la creencia de éste de que comportarnos virtuosamente, nos traerá inevitablemente la felicidad. Es cierto que en la mayoría de los casos actuar conforme a la virtud puede elevar el espíritu de una persona, pero también es cierto de que la sociedad en determinadas circunstancias puede castigar a una persona por actuar conforme a su virtud. Aristóteles relaciona lo noble, con lo placentero; y esto no es del todo correcto, ya que una acción noble puede perjudicar gravemente a la persona.

Otra crítica es la referida es la vinculada a que Aristóteles cree que solo a través de los actos virtuosos se puede llegar a la felicidad, en este punto se puede plantear que es posible llegar a un estado de felicidad sin necesidad de comportarnos en relación a la virtud; por ejemplo, podría ser posible alcanzar la felicidad abandonándonos a los que al placer puro, sin estar atados a cuestionamientos morales, solo concentrados en que el cato nos brinde placer, esto debido a que si permanecemos en este estado, podríamos ser capaces de dejar de lado todo dolor, que obviamente es un impedimento hacia la felicidad.