A lo largo de sus producciones literarias, Sor Juana nos sorprende por su dominio de la retórica y de los diversos artilugios poéticos, siendo característica suya la condensación de problemas y sentimientos en frases ingeniosas; Sor Juana, que no desconocía en lo absoluto la filosofía, trata de volcar entonces sus desvelos intelectuales en versos aparentemente dotados de una acogedora sencillez y como cualquier poeta ingenuo, su pondus la impulsa a expresar con palabras los pensamientos que hasta el momento han sido imposibles de trazar por la humanidad.
En el presente trabajo me encargaré del análisis de un verso escrito por Sor Juana, que a mi humilde opinión, mediante su característica llena de herramientas poéticas, de compresión de asuntos y de fuerte imagen me hace pensar que es un digno exponente de lo que en resumidas cuentas significa la misma Sor Juana de la Cruz; es un verso netamente emotivo que además de haber conmovido mi mente, ha tocado con una graciosa facilidad mi poco docto espíritu. El motivo por el cuál solo he decidido trabajar en base a un verso es que considero que dicha pieza , por sus propiedades, es un ejemplo basto de la escritura de la poeta y porque su análisis, debido a todo lo que intenta comprimir, tomará más del tiempo habitual.
El verso es el siguiente: “lágrimas negras de mi pluma triste”y es parte del poema conocido como: “Que consuela a un celoso, epilogando la serie de los amores” incluida en sus “Sonetos”.
En primer lugar, cabe destacarse la animación utilizada, el acto de otorgarle propiedades humanas a una pluma, nótese esta animación en dos partes:
Primero, el hecho de que la pluma vierte lágrimas, y segundo la sorprendente revelación de un estado emocional cuando se hace referencia a que dicho objeto se encuentra triste. Lo que Sor Juana pretende tras esta animación es la formulación de una metáfora que pueda portar el peso de lo que ella desea plasmar y que logre amoldarse a la perfección a su pensamiento.
Nótese además que el empleo del adjetivo “negro” no es casual, Sor Juana lo que desea al escribir lágrimas negras es enfatizar en la tristeza, la pesadumbre, la nostalgia; en este sentido brinda al color un estado emocional, y hace uso de lo que hoy podemos llamar lenguaje de los colores; el empleo de la palabra “negras” quiere transmitir una cierta oscuridad, unas lágrimas ocultas, no expuestas a simple vista, unas lágrimas escondidas en lo profundo.
El verso de Sor Juana puede dividirse en dos partes complementarias: “lágrimas negras” y “pluma triste”, unidas por los artículos “de” y “mi”, cada parte es un verso en sí, y denotan claramente un estado de ánimo, sin embargo juntas, dicha pieza adquiere un significado extra aparte de los dos ya existentes que es: el dolor que padece Sor Juana producto de escribir.
Para entender este último punto hay que contemplar una vez más el verso completo: “lágrimas negras de mi pluma triste”, así, ahora podemos apreciar el mensaje escondido: Sor Juana nos habla de un acto de escribir doloroso, triste, el hecho de que su pluma llore significa que ella misma lo hace a través del objeto, he aquí que el acto del cuál nos habla es un acto prohibido puesto que las lágrimas son de color negro y se pueden interpretar como unas lágrimas tras las sombras, escondidas de la vista de los demás, un llanto que rehulle las miradas; podemos comprender que el acto de escribir genera un dolor que no puede ser entendido o revelado y que tanto el acto como lo que propicia en el sujeto debe permanecer oculto.
Tras el análisis del mensaje del verso es necesario declarar que contiene cierto tinte autobiográfico puesto que Sor Juana siempre fue mal vista en su época por el hecho de escribir y leer en demasía. En su época se creía que los conocimientos provocaban el alejamiento de Dios y es por esto que a las monjas no se les inculcaban tales ejercicios, además de esto, las mujeres en general no tenían los mismos accesos a la cultura que los hombres, la educación menos valía la inteligencia de la féminas y las relegaba a tareas no intelectuales; Sor Juana siempre escribió casi clandestinamente y siempre con el temor de ser malentendida. Ella misma, en sus cartas, declara que sufría de unas ansias incontenibles de empaparse de conocimiento, que ella pensaba que el hecho de conocer más a fondo el mundo, contrariamente a lo que pensaba la mayoría de gente a su al rededor, nos acerca más a Dios, que Dios nos había dado la razón para que la usemos y para que lo encontremos mediante el uso intenso de la misma; sin embargo, difícilmente iba a lograr su cometido y es por esto que sufre mucho debido a su afán de escribir y de plasmar las ideas que le mortificaban el espíritu y que por ende no estaba en la capacidad de silenciar.
Puede verse además la sugerencia que el verso nos hace: el mensaje de Sor Juana no es completamente claro, hay que ir más allá del propio verso para entenderlo. Este poder de la sugerencia es importantísimo en la poesía, pues la poesía no plantea la realidad así como así, sino que la sugiere, Sor Juana es conciente de esto y seduce al lector con esta no explicites.
Es detectable también la técnica de la caja china en el verso: en él, se nos narra a una persona, que sería el objeto poético, que se siente triste cuando escribe; y en la realidad, la poetiza, que sería el objeto social, al estar escribiendo el poema y tener el mismo carácter que el personaje, sufre al momento de escribir. Tanto la Sor Juana del poema, como la Sor Juana que ha escrito el poema han escrito, valga la redundancia, y han experimentado en dicha acción el dolor. El funcionamiento de la técnica de la caja china, que es un sistema complejísimo de desarrollar, en una frase tan corta, se debe al carácter autobiográfico del verso, puesto que la poeta habla de ella misma y de esta forma se divide en dos: objeto social y objeto poético.
Otro punto interesante es el poder de adjetivación, los dos adjetivos empleados son exactos y desbordan en significación, los dos descubren un sentimiento, y hasta cierto punto pueden considerarse sinónimos si los analizamos por separado: la palabra “negro” puede traducirse como un estado triste y la palabra “triste” puede visualizarse con el color negro
Con respecto a esto último, cabe destacarse que sor Juana tiene un gran poder visual, maneja la proyección de imágenes resilientes, es por esto que plantea sentimientos mediante la asociación de tonalidades cromáticas en la mente del lector, el efecto producido por esta técnica se debe a que cuando una persona lee el nombre de un color, inmediatamente piensa en el mismo, y más aún, si se ha pensado en el color, se ha experimentado un estado emocional, puesto que los colores están contaminados de determinadas cargas emotivas. La imagen del verso completo es totalmente tangible: una pluma escribiendo: la figura es reconocible en el mundo real, más el mensaje se haya más allá de este simple armazón; podemos decir, que el alma del verso se haya encerrada en un cuerpo sencillo.
La estructura del verso es bastante curiosa, podemos reordenar las palabras y el mensaje a tratar no se distorsiona en lo esencial, es decir, si invertimos el orden de las palabras, el mensaje seguirá siendo coherente: podemos decir: “lágrimas tristes de mi pluma negra” en vez de “lágrimas negras de mi pluma triste”, y aún así el lector podrá deducir que Sor Juana está intentando plasmar el dolor que siente al escribir.
Se resalta la armonía de las palabras, ninguna es demasiado larga o demasiado corta con respecto a las demás, es decir, todas tienen un tamaño similar, salvo la primera: “lágrimas”, que es mas extensa por tratarse de la introducción al verso, de todas maneras, su extensión no dista mucho de las otras palabras que conforman el fragmento.
Es importante el sonido en una poesía, el verso de Sor Juana en este sentido cumple el requisito: el verso, dicho vulgarmente: “no chilla” y se muestra apetecible al oído, he notado por mi parte que ningún poema suyo cae en este grave problema melódico, siendo sus creaciones pulcras en ese aspecto.
A través de este verso se puede conocer más acerca de la poeta, y no me refiero al hecho ya nombrado líneas atrás sobre que el fragmento que hoy medito sea autobiográfico, sino porque si vemos el magnífico empleo de herramientas poéticas, de técnicas, la estructura simplista y a la vez compleja, el mensaje encerrado en una metáfora bien elaborada, nos daremos cuenta que Sor Juana era una perfeccionista, que se esmeraba, incluso en sus poemas que no eran hipoverbales y que nunca dejaba atrás ningún defecto menor; Sor Juana necesitó emplear mucho tiempo en cada una de sus líneas, puesto que mediante de cada una de ellas, buscaba expresar muchas ideas y sentimientos.
Se puede deducir además que nuestra poeta, manejaba ciertos conocimientos como astrología, filosofía, arte, etc, que le servían para comunicarse de mejor manera y en la mayoría de casos que le traían a la cabeza la inspiración para escribir.
( esto de los conocimientos se pueden ver reflejados en sus obras poéticas en general, no me estoy refiriendo al verso motivo de análisis).
Nótese que todas las palabras empleadas, salvo “lágrimas” (que tiene que ser diferente en cierta medida puesto que es la introducción al verso), son esdrújulas; se comprende entonces un poco del porqué de lo bien que se escuchan tales versos, pero hay que subrayar además que es muy difícil juntar muchas palabras con el acento en la misma sílaba sin producir un sonido desigual y desequilibrado; es aquí cuando podemos valorar el grado de brillantez de la poeta, en este caso Sor Juana, quién una vez mas nos demuestra que por cada palabra que escribe se le van horas enteras por así decirlo.
Dada la cantidad de observaciones realizadas a un solo verso, se puede decir que Sor Juana imprimía en pocas palabras muchas ideas, que su poesía es profunda y que a simple vista parece sencilla, mas las metáforas que usa desean transmitir algo más, algo no visible; su poesía es un comprimido de ideas y pensamientos, pero es una compresión hermosa, una compresión armónica, tanto estructuralmente como melódicamente, simplemente no se puede hablar de esta poeta sin recurrir a un análisis concienzudo de su obra literaria, Sor Juana no es sentarse un día y leer sus trabajos con la ligereza del momento, es una poeta que requiere tiempo y empeño y que sobretodo requiere de un interés hacia el mundo del conocimiento que ella misma busco alcanzar durante toda su vida.
Finalmente, tras haber hecho un brevísimo análisis del verso: “lágrimas negras de mi pluma triste”de Sor Juana Inés de la Cruz, espero haber convencido o al menos hecho reflexionar sobre las características de escritura de esta poeta y ahondado más en su forma de ser y en su manera muy peculiar de observar el mundo. He extraído un grandioso provecho al desarrollo de este ensayo y espero que no haya sido en vano para el que lo lee. Me parece interesante la poesía de Sor Juana y dada esta experiencia me apremia volver a repetir este ejercicio, el cuál recomiendo con otros versos propiedad de la misma poetisa.
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"Pandemonio, es una ciudad en la que deambulan Las Voces y en la que se aguarda eternamente al huésped, sea digno o indigno, sea bueno o malo. En su interior apretujados caídos revolotean en una sola carne, dispuestos a saltar al primer navío disponible, como una fuga de agua caliente.
Solo tendrás un segundo para decidir: Leer el Manual de la Naturaleza Doble, y dar la vida; o ser otro para siempre" El capitánTulik; José R. García.
lunes, diciembre 01, 2008
Análisis de un solo verso de Sor Juana Inés de la Cruz
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domingo, noviembre 30, 2008
Visión de Dante sobre algunos personajes que aparecen en el Infierno
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Dante a lo largo de su epopeya recurre a la inclusión de un sinfín de personajes, el hecho de que cree una maraña tan inmensa se debe a que ve necesario disminuir las improbabilidades de encuentro con personajes históricos relevantes.
Dentro de todo el poema sin embargo han habido algunos personajes en particular que me han llamado la atención. En primer lugar Ulises; Dante muestra una visión del viajero de la Odisea bastante diferente a la que se entiende en la obra de Homero, en todo caso, esto se debe a que lo analiza desde una mentalidad diferente a la que existía en la época en que el poema homérico fue escrito.
Ulises está condenado por ser un mentiroso, y en este sentido me parece muy graciosa la sentencia; Ulises le mintió a Penélope, le fue infiel en varias oportunidades, incluso, como se hace referencia en la obra de Hesíoso: “los trabajos y los días”, Ulises, cuando estuvo lejos de Itaca tuvo hijos con otras mujeres, cuestión que puede escucharse extraña pero que dejaría de serlo si nos enfocamos en la mentalidad de ese entonces, que consideraba a la mujer tan solo como un bien; Ulises le miente al cíclope Polifemo de una forma que deja al pobre hijo de Posidón completamente humillado, Ulises es pues, el pinocho griego y por lo tanto Dante considera que es una persona apta para quemar su cuerpo de madera en el infierno, o mejor dicho congelarlo debido a que su concepción es más bien fría que calurosa. Pero en fin, la cuestión es que el poeta nos brinda una nueva forma de ver al héroe griego, y hasta cierto punto lo dota de imperfecciones.
Dante se entusiasma cuando retrata a los personajes de la literatura griega, se esmera por hacer que sus diálogos sean creíbles para el lector, les da nuevamente vida después de que éstos han estado repitiendo los mismos actos y discursos desde la época del mundo antiguo; me gusta pensar que Dante se apiada de ellos y les da nuevas cosas qué decir, pero basta, no los quiero aburrir con la explicación referida a mi manía irracional de ver a los personajes literarios como actores de cine o de teatro, que como es natural, se aburren del mismo guión.Podría concluirse que Dante usa a estos personajes en la mediada que se siente familiarizado con la literatura clásica
Es entrañable la forma en la que Ulises narra la manera como llegó al purgatorio, se cuenta que luego de llegar a Itaca, él y sus hombres se dan cuanta de que lo suyo no es andar por ahí “chochos” cuidando a sus nietos y deciden emprender en plena senectud un viaje a lo Desconocido, todo bien hasta ahí, pero su viaje no resulta tan fructífero puesto que se estrellan contra una montara, acontecimiento extraño puesto que las montañas son bastante grandes para que pasen desapercibidas, pero en todo caso se culpa al viento y a la furiosa tempestad; lo más resaltante de todo esto y un factor que demuestra la brillantez de Dante es que la montaña en la que se estrellan Ulises y sus hombres es la montaña del purgatorio.
El poeta florentino se identifica con Ulises, el riesgo que el viejecillo griego corre le parece atractivo, y en cierta mediada me atrevo a decir que Dante es un adicto al riesgo, debido a que para escribir tamaño poema se nenecita mas que sabiduría y buena técnica: se necesita empuje y jugarse el destino de tajo.
Otro de los personajes que me provoca un gran afecto es Brunetto Latini: el maestro de Dante; el poeta lo aprecia a montones, lo coloca en el Infierno, sí, pero lo aprecia, lo castiga con el dolor eterno torturándolo y llagándole la cara, pero qué más da: el punto es que Brunetto había despertado en el florentino un gran respeto.
Siendo escrutado así por tal pandilla,
Uno me conoció y, al punto, asido
a mi manto, exclamó: “¡Qué maravilla!”
Y yo, que vi su brazo a mí tendido,
Miré el rostro cocido por completo
Sins er por sus ampollas impedido
De conocer al punto a aquel sujeto;
E, inclinando la mano hacia su frente
Repuse:” ¿Estáis aquí señor Brunetto?”
(22-30)
Sin duda un pasaje conmovedor, Dante y su maestro en medio del Infierno, mostrando su aprecio a un chamuscado Latini: simplemente incomparable.
Otro y el último personaje que he considerado en mi breve ensayo es Judas; el motivo de mi interés por este personaje se debe a que su castigo es bastante peculiar, es mascado por Lucifer, pero no solamente nuestro simpático ángel-muerciélago lo babosea y clava los molares sino que además de esto con sus garras araña y destroza la carne del discípulo desde la cintura para abajo. Es una castigo eterno como todos, probablemente Lucifer se canse, pero debe seguir por la eternidad cumpliendo con su deber, es curioso, pero es probable que el castigo de Lucifer sea el hecho de masticar a Judas, de no comerlo, sino limitarse a masticar su alimento: a mi parecer, el peor castigo que pudo recrear el malicioso de Alighieri.
Dentro de todo el poema sin embargo han habido algunos personajes en particular que me han llamado la atención. En primer lugar Ulises; Dante muestra una visión del viajero de la Odisea bastante diferente a la que se entiende en la obra de Homero, en todo caso, esto se debe a que lo analiza desde una mentalidad diferente a la que existía en la época en que el poema homérico fue escrito.
Ulises está condenado por ser un mentiroso, y en este sentido me parece muy graciosa la sentencia; Ulises le mintió a Penélope, le fue infiel en varias oportunidades, incluso, como se hace referencia en la obra de Hesíoso: “los trabajos y los días”, Ulises, cuando estuvo lejos de Itaca tuvo hijos con otras mujeres, cuestión que puede escucharse extraña pero que dejaría de serlo si nos enfocamos en la mentalidad de ese entonces, que consideraba a la mujer tan solo como un bien; Ulises le miente al cíclope Polifemo de una forma que deja al pobre hijo de Posidón completamente humillado, Ulises es pues, el pinocho griego y por lo tanto Dante considera que es una persona apta para quemar su cuerpo de madera en el infierno, o mejor dicho congelarlo debido a que su concepción es más bien fría que calurosa. Pero en fin, la cuestión es que el poeta nos brinda una nueva forma de ver al héroe griego, y hasta cierto punto lo dota de imperfecciones.
Dante se entusiasma cuando retrata a los personajes de la literatura griega, se esmera por hacer que sus diálogos sean creíbles para el lector, les da nuevamente vida después de que éstos han estado repitiendo los mismos actos y discursos desde la época del mundo antiguo; me gusta pensar que Dante se apiada de ellos y les da nuevas cosas qué decir, pero basta, no los quiero aburrir con la explicación referida a mi manía irracional de ver a los personajes literarios como actores de cine o de teatro, que como es natural, se aburren del mismo guión.Podría concluirse que Dante usa a estos personajes en la mediada que se siente familiarizado con la literatura clásica
Es entrañable la forma en la que Ulises narra la manera como llegó al purgatorio, se cuenta que luego de llegar a Itaca, él y sus hombres se dan cuanta de que lo suyo no es andar por ahí “chochos” cuidando a sus nietos y deciden emprender en plena senectud un viaje a lo Desconocido, todo bien hasta ahí, pero su viaje no resulta tan fructífero puesto que se estrellan contra una montara, acontecimiento extraño puesto que las montañas son bastante grandes para que pasen desapercibidas, pero en todo caso se culpa al viento y a la furiosa tempestad; lo más resaltante de todo esto y un factor que demuestra la brillantez de Dante es que la montaña en la que se estrellan Ulises y sus hombres es la montaña del purgatorio.
El poeta florentino se identifica con Ulises, el riesgo que el viejecillo griego corre le parece atractivo, y en cierta mediada me atrevo a decir que Dante es un adicto al riesgo, debido a que para escribir tamaño poema se nenecita mas que sabiduría y buena técnica: se necesita empuje y jugarse el destino de tajo.
Otro de los personajes que me provoca un gran afecto es Brunetto Latini: el maestro de Dante; el poeta lo aprecia a montones, lo coloca en el Infierno, sí, pero lo aprecia, lo castiga con el dolor eterno torturándolo y llagándole la cara, pero qué más da: el punto es que Brunetto había despertado en el florentino un gran respeto.
Siendo escrutado así por tal pandilla,
Uno me conoció y, al punto, asido
a mi manto, exclamó: “¡Qué maravilla!”
Y yo, que vi su brazo a mí tendido,
Miré el rostro cocido por completo
Sins er por sus ampollas impedido
De conocer al punto a aquel sujeto;
E, inclinando la mano hacia su frente
Repuse:” ¿Estáis aquí señor Brunetto?”
(22-30)
Sin duda un pasaje conmovedor, Dante y su maestro en medio del Infierno, mostrando su aprecio a un chamuscado Latini: simplemente incomparable.
Otro y el último personaje que he considerado en mi breve ensayo es Judas; el motivo de mi interés por este personaje se debe a que su castigo es bastante peculiar, es mascado por Lucifer, pero no solamente nuestro simpático ángel-muerciélago lo babosea y clava los molares sino que además de esto con sus garras araña y destroza la carne del discípulo desde la cintura para abajo. Es una castigo eterno como todos, probablemente Lucifer se canse, pero debe seguir por la eternidad cumpliendo con su deber, es curioso, pero es probable que el castigo de Lucifer sea el hecho de masticar a Judas, de no comerlo, sino limitarse a masticar su alimento: a mi parecer, el peor castigo que pudo recrear el malicioso de Alighieri.
Visión de Florencia y de los Florentinos en el Infierno de Dante
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Dante, fue un poeta que brindó lo mejor de sí para con su ciudad, años enteros de servicio prestado; mas la misma le fue ingrata y lo despreció y expulsó de sus muros, Dante herido en el corazón y en el orgullo fue obligado a ver la ciudad desde lejos para toda su vida. El poeta sin embargo nunca abandonó las esperanzas del retorno, y la herida que le causó tal exilio fue enorme:
“Desde que fue gusto de los ciudadanos de la bellísima y famosísima hija de Roma, Florencia, arrojarme fuera de su dulce seno- en el cual nacido y criado fui hsata el como de mi vida, y en el cual, en buena paz con ella, deseo con todo el corazón reposar el ánimo cansado y terminar el tiempo que me ha sido concedido’, por casi todas las partes por las que esta lengua [la italiana] se extiende, peregrino, casi mendigando, he andado, mostrando contra mi deseo la llaga de la fortuna, que suele injustamente al llagado muchas veces imputada.
Verdaderamente he sido leño sin vela y sin gobernalle; llevado a diferentes puertos y abras y litorales por el viento seco que exhala la dolorosa pobreza; y me he presentado ante los ojos de muchos que quizá por tener cierta fama me habían de otra forma imaginad, en opinión de los cuales, no solo mi persona se envilecio, sino que se despreció toda mi obra, tanto la ya hecha como la que estaba por hacer” .
(II, III- El Convite)
Podemos entender entonces que con el tiempo Dante sintiera desprecio por muchos de los florentinos y hasta cierta medida con la propia Florencia, su herida nunca sanó por completo y convirtió en una venganza sutil algunos pasajes de la Comedia.
Es curioso darnos cuanta que en el infierno de la Comedia, se hayan desperdigados cantidades grandísimas de florentinos, esto a mi parecer refleja un desquite, un colocar a determinadas personas que le pudieron ocasionar daños en un estado inferior al de él mismo, se esboza la venganza. Puede que el Dante, objeto poético que se encuentra en el infierno junto a Virgilio sea objetivo al analizar a los pecadores y no tenga nada que ver con sus sentencias, pero se me presenta tentadora la hipótesis de creer que esto de colocarse de personaje principal no es mas que una excusa para hacer arder en la eternidad a varios de los que el considera, digámoslo así, gente en su contra. Dante hace uso de su brillantez, y al colocarse en el poema como un ente que nada tiene que ver con los castigos impuestos, se lava las manos a pesar de que sí es él quien designa a cada uno de los seres representados a tal o cual círculo, a tal o cuál castigo, a tal o cual humillación.
Algunos estudiosos postulan que Florencia puede ser interpretada como la selva oscura en la que aparece Dante al inicio de la epopeya, y que es oscura debido a que su porvenir cumple con esta característica. Desde mi punto de vista, tal perspectiva puede hallar cabida en la realidad, no sería muy extraño que el poeta se refiriera a esto, o mejor aún, podría ser que varias de sus alegorías tuviesen doble significado, siendo la selva oscura tanto la vida terrenales general en la que el hombre se ve perdido como la Florencia en plena disputa y perdición cuyo futuro es un enigma.
La Florencia que Dante representa en el infierno es una ciudad en medio de cambios bruscos, en medio del caos, hay un afán por descubrir la manera de solucionar la situación y una curiosidad sobre los asuntos que ocurrirían más tarde.
Podemos deducir que Dante estuvo eternamente preocupado con el porvenir de su ciudad natal y nunca dejó de preocuparle su futuro.
Podemos entender aún mejor toda la representación de Florencia y de los florentinos en el infierno de Dante si nos enteramos de la época en la que se presume que escribió esta parte del poema; para esto, cito a Ángel Crespo:
“Dante escribió el Infierno en una época de radicalización política, una de cuyas causas, más próxima que remota, era la batalla de Montaperti.[…]
(Ángel Crespo- dante y su obra, pag. 18)
Podemos ahora comprender que se haya formulado una Florencia desordenada y que Dante estuviera preocupado por que sucediese un acontecimiento brusco que modificara el curso de la historia de dicha ciudad.
El poeta solo salva una que otra persona, como por ejemplo a un ancestro suyo, a su madre y a Beatriz; los tres, se hayan en el paraíso. Sin embargo Dante no hace mención de su padre, por lo que se suele pensar que algún pecado cometió estando en vida y que el poeta prefirió no tocar el tema. Uno de los pasajes mas conmovedores es rescatado también por Ángel crespo y trata el momento en el cuál Dante se encuentra con su maestro Brunetto Latini en el infierno:
Siendo escrutado así por tal pandilla,
Uno me conoció y, al punto, asido
a mi manto, exclamó: “¡Quñe maravilla!”
Y yo, que vi su brazo a mí tendido,
Miré el rostro cocido por completo
Sins er por sus ampollas impedido
De conocer al punto a auel sujeto;
E, inclinando la mano hacia su frente
Repuse:” ¿Estáis aquí señor Brunetto?”
22-30
Nótese que no todos los florentinos eran despreciados por Dante, pero que la mayoría, era totalmente digna de su repudio.
Ahora, la preocupación por Florencia y su amor hacia ella se puede ver reflejado en el pasaje en el cuál Dante se encuentra con el traidor Bocca degli Abati, el cuál había sido el culpable de una masacre en Florencia, y reacciona de una manera inesperada y totalmente fuera de contexto, tomando en cuanta su normal estado sereno a lo largo de la epopeya….
“En efecto , al oír su nombre , pronunciado por otro condenado , quiere obligarle a confesar quién es y, agarrándole por los cabellos, le deja la cabeza medio pelada. Nunca se pinta a Dante tan cruel como en esta escena, y si bien es lícito dudar de que en su vida real se mostrase alguna vez tan dsepiadado, no por ello dejan de formara parte de su personalidad- y aún de la vida que soñó para sí-tanto escenas como ésta cuanto aquellas otras que, en el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso, le muestran caritativ, amable o extasiado ante la belleza de la creación. Al poeta hay que conocerlo por su vida, pero también por su obra, y creemos que, sobretodo por ésta. Su completa, y compleja personalidad se releja mejor en sus escritos- en los más importantes de los cuales él mismo es protagonista- que en todos los documentos de archivos hallados y por hallar; de ahí que no sintamos escrúpulo alguno cuando los utilizamos para tratar de comprender sus sentimientos”
(Ángel Crespo- dante y su obra, pag. 20)
El autor Ángel Crespo es el que habla sobre esta reacción exagerada de Dante frente al traidor, a mi parecer su reacción demuestra un sentir profundo hacia su ciudad y el hecho de que reaccione tan exageradamente se debe a que quería demostrar mediante la misma exageración en el pasaje, el grado de amor que sentía hacia Florencia. Hasta cierto punto me perece que Dante quiere crear un comportamiento disonante en su personaje para que esta conducta pueda ser fácilmente detectada.
Otro momento a analizar es el enigma del Lebrel que plantea Dante, si es, claro, si caemos en la supocisión de que la situación que va a trastocar dicho ente es la realidad confusa de la ciudad de Florencia. El enigma hasta el momento no tiene una solución precisa, la identidad del Lebrel permanece oculta hasta al más grande de los dantólogos, pero eso no es lo que importa en estos momentos, lo que me importa es solo ver la preocupación de Dante por Florencia, la necesidad de incluso pensar en una profecía para vislumbrara el futuro de la cuidad con la que mantenía una dañina relación de amor-odio.
Esto es lo que a grandes rasgos he podido extraer sobre la visión de Dante sobre Florencia y los florentinos, espero haber cumplido con las expectativas del lector.
“Desde que fue gusto de los ciudadanos de la bellísima y famosísima hija de Roma, Florencia, arrojarme fuera de su dulce seno- en el cual nacido y criado fui hsata el como de mi vida, y en el cual, en buena paz con ella, deseo con todo el corazón reposar el ánimo cansado y terminar el tiempo que me ha sido concedido’, por casi todas las partes por las que esta lengua [la italiana] se extiende, peregrino, casi mendigando, he andado, mostrando contra mi deseo la llaga de la fortuna, que suele injustamente al llagado muchas veces imputada.
Verdaderamente he sido leño sin vela y sin gobernalle; llevado a diferentes puertos y abras y litorales por el viento seco que exhala la dolorosa pobreza; y me he presentado ante los ojos de muchos que quizá por tener cierta fama me habían de otra forma imaginad, en opinión de los cuales, no solo mi persona se envilecio, sino que se despreció toda mi obra, tanto la ya hecha como la que estaba por hacer” .
(II, III- El Convite)
Podemos entender entonces que con el tiempo Dante sintiera desprecio por muchos de los florentinos y hasta cierta medida con la propia Florencia, su herida nunca sanó por completo y convirtió en una venganza sutil algunos pasajes de la Comedia.
Es curioso darnos cuanta que en el infierno de la Comedia, se hayan desperdigados cantidades grandísimas de florentinos, esto a mi parecer refleja un desquite, un colocar a determinadas personas que le pudieron ocasionar daños en un estado inferior al de él mismo, se esboza la venganza. Puede que el Dante, objeto poético que se encuentra en el infierno junto a Virgilio sea objetivo al analizar a los pecadores y no tenga nada que ver con sus sentencias, pero se me presenta tentadora la hipótesis de creer que esto de colocarse de personaje principal no es mas que una excusa para hacer arder en la eternidad a varios de los que el considera, digámoslo así, gente en su contra. Dante hace uso de su brillantez, y al colocarse en el poema como un ente que nada tiene que ver con los castigos impuestos, se lava las manos a pesar de que sí es él quien designa a cada uno de los seres representados a tal o cual círculo, a tal o cuál castigo, a tal o cual humillación.
Algunos estudiosos postulan que Florencia puede ser interpretada como la selva oscura en la que aparece Dante al inicio de la epopeya, y que es oscura debido a que su porvenir cumple con esta característica. Desde mi punto de vista, tal perspectiva puede hallar cabida en la realidad, no sería muy extraño que el poeta se refiriera a esto, o mejor aún, podría ser que varias de sus alegorías tuviesen doble significado, siendo la selva oscura tanto la vida terrenales general en la que el hombre se ve perdido como la Florencia en plena disputa y perdición cuyo futuro es un enigma.
La Florencia que Dante representa en el infierno es una ciudad en medio de cambios bruscos, en medio del caos, hay un afán por descubrir la manera de solucionar la situación y una curiosidad sobre los asuntos que ocurrirían más tarde.
Podemos deducir que Dante estuvo eternamente preocupado con el porvenir de su ciudad natal y nunca dejó de preocuparle su futuro.
Podemos entender aún mejor toda la representación de Florencia y de los florentinos en el infierno de Dante si nos enteramos de la época en la que se presume que escribió esta parte del poema; para esto, cito a Ángel Crespo:
“Dante escribió el Infierno en una época de radicalización política, una de cuyas causas, más próxima que remota, era la batalla de Montaperti.[…]
(Ángel Crespo- dante y su obra, pag. 18)
Podemos ahora comprender que se haya formulado una Florencia desordenada y que Dante estuviera preocupado por que sucediese un acontecimiento brusco que modificara el curso de la historia de dicha ciudad.
El poeta solo salva una que otra persona, como por ejemplo a un ancestro suyo, a su madre y a Beatriz; los tres, se hayan en el paraíso. Sin embargo Dante no hace mención de su padre, por lo que se suele pensar que algún pecado cometió estando en vida y que el poeta prefirió no tocar el tema. Uno de los pasajes mas conmovedores es rescatado también por Ángel crespo y trata el momento en el cuál Dante se encuentra con su maestro Brunetto Latini en el infierno:
Siendo escrutado así por tal pandilla,
Uno me conoció y, al punto, asido
a mi manto, exclamó: “¡Quñe maravilla!”
Y yo, que vi su brazo a mí tendido,
Miré el rostro cocido por completo
Sins er por sus ampollas impedido
De conocer al punto a auel sujeto;
E, inclinando la mano hacia su frente
Repuse:” ¿Estáis aquí señor Brunetto?”
22-30
Nótese que no todos los florentinos eran despreciados por Dante, pero que la mayoría, era totalmente digna de su repudio.
Ahora, la preocupación por Florencia y su amor hacia ella se puede ver reflejado en el pasaje en el cuál Dante se encuentra con el traidor Bocca degli Abati, el cuál había sido el culpable de una masacre en Florencia, y reacciona de una manera inesperada y totalmente fuera de contexto, tomando en cuanta su normal estado sereno a lo largo de la epopeya….
“En efecto , al oír su nombre , pronunciado por otro condenado , quiere obligarle a confesar quién es y, agarrándole por los cabellos, le deja la cabeza medio pelada. Nunca se pinta a Dante tan cruel como en esta escena, y si bien es lícito dudar de que en su vida real se mostrase alguna vez tan dsepiadado, no por ello dejan de formara parte de su personalidad- y aún de la vida que soñó para sí-tanto escenas como ésta cuanto aquellas otras que, en el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso, le muestran caritativ, amable o extasiado ante la belleza de la creación. Al poeta hay que conocerlo por su vida, pero también por su obra, y creemos que, sobretodo por ésta. Su completa, y compleja personalidad se releja mejor en sus escritos- en los más importantes de los cuales él mismo es protagonista- que en todos los documentos de archivos hallados y por hallar; de ahí que no sintamos escrúpulo alguno cuando los utilizamos para tratar de comprender sus sentimientos”
(Ángel Crespo- dante y su obra, pag. 20)
El autor Ángel Crespo es el que habla sobre esta reacción exagerada de Dante frente al traidor, a mi parecer su reacción demuestra un sentir profundo hacia su ciudad y el hecho de que reaccione tan exageradamente se debe a que quería demostrar mediante la misma exageración en el pasaje, el grado de amor que sentía hacia Florencia. Hasta cierto punto me perece que Dante quiere crear un comportamiento disonante en su personaje para que esta conducta pueda ser fácilmente detectada.
Otro momento a analizar es el enigma del Lebrel que plantea Dante, si es, claro, si caemos en la supocisión de que la situación que va a trastocar dicho ente es la realidad confusa de la ciudad de Florencia. El enigma hasta el momento no tiene una solución precisa, la identidad del Lebrel permanece oculta hasta al más grande de los dantólogos, pero eso no es lo que importa en estos momentos, lo que me importa es solo ver la preocupación de Dante por Florencia, la necesidad de incluso pensar en una profecía para vislumbrara el futuro de la cuidad con la que mantenía una dañina relación de amor-odio.
Esto es lo que a grandes rasgos he podido extraer sobre la visión de Dante sobre Florencia y los florentinos, espero haber cumplido con las expectativas del lector.
Comparación de l Infierno de Dante Con el Infierno Japonés, Chino, Azteca y Nórdico
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Etimnimlogía:
La palabra infierno proviene del latín infernum,1 "inferior".
(rae)
La concepción del infierno no le es única al cristianismo, podemos enumerar una serie de lugares que cumplen con las facultades infernales si indagamos en la historia de las antiguas civilizaciones sea de oriente como de occidente. Se puede afirmar que el hecho mismo de que casi todas las culturas, cuenten
con un paraíso y con un infierno es producto de un anhelo a una vida posterior donde se alcance un estado de plena felicidad y de paz y donde se halle una recompensa por el comportamiento brindado estando con vida. Si bien es cierto la creencia del más allá es universal, nadie puede afirmar y mucho menos demostrar con exactitud lo que hay en ella.
En el presente ensayo lo que me apremia es elaborar una breve comparación entre el infierno de dante y los infiernos concebidos por el Islamismo, por la cultura japonesa, la china y por la civilización azteca y nórdica; enfatizaré en las semejanzas tanto como en las diferencias, creyendo importante los dos pasos para conocer hasta qué punto Dante utiliza nuevas ideas y hasta que punto su pensamiento se asemeja al de otras culturas.
En primer lugar hay que establecer el porqué de las divergencia en la manera de ver el infierno, el principal motivo está relacionado con la manera en que las culturas entienden el transcurrir del tiempo ¿y cómo esto puede influenciar en una concepción del mundo de ultratumba?, pues muy simple, el infierno es un lugar donde se padece y seis se padece entonces se debe especificar el tiempo de tal padecimiento, ahora, en este punto, las culturas con una historia lineal lo conciben como infinito y las religiones con una historia cíclica suelen mostrar el infierno como un período intermediario entre encarnaciones (por ejemplo, el Di- Yu chino); dándose de esta manera las principales diferencias.
Para seguir con el desarrollo de este trabajo he creído conveniente ir abordando cada infierno a tratar en orden, insertando en cada uno los respectivos comentarios referidos a las semejanzas y diferencias con el infierno de Dante.
Empecemos por Dante mismo: En el infierno compuesto por el florentino podemos resumir la influencia de dos tradiciones: la cristiana y la grecolatina; el mundo del más allá mediante alegorías inteligentes y formas que solo el poeta puedo diseñar.
Su infierno es un enorme abismo en forma de cono invertido y está dividido en círculos o estancias, en cada círculo se hayan designados los condenados según sus tipos de pecado, teniendo los pecados más perdonables por Dios lugares menos cercanos al centro de la tierra y con padecimientos menores con respecto a aquellos que cometieron los pecados más terribles. Los hombres en este lugar transmutan en otros seres y en este punto se puede apreciar las regresiones que hacen los pecadores al transmutar en animales, plantas y hasta minerales, como muy bien lo señala Ángel crespo en su libro “dante y su obra”. Otra característica es que las almas están dotadas de cuerpo, ya que para padecer deben estar expuestos al mundo sensorial. Finalmente Dante nos muestra un infierno que en el que la salvación es inexistente: las almas están condenadas por toda la eternidad sin la más mínima esperanza de dejar atrás su calvario. En el infierno de Dante no hay quién juzgue sino que son los mismos humanos quienes eligen ir a tal lugar, puesto que el pecado para el poeta es una elección.
Antes de comenzar con la descripción tanto del Infierno chino como del infierno japonés, creo conveniente trazar a grandes rasgos las percepciones que tenía el budismo sobre este mundo, debido a que, ambas culturas, se vieron influenciadas enormemente por dicha religión.
En primer lugar se muestra como un lugar de dolor y tormento, hay tanto lugares calientes como lugares fríos, pero los lugares de mayor sufrimiento son los fríos.
A pesar de que las representaciones budistas tradicionales del infierno guardan un cercano parecido con aquellas del cristianismo, el concepto del infierno difiere de su equivalente cristiano en dos aspectos importantes: el infierno no es un castigo y su duración no es infinita. Cada mundo es la objetivización de la propia mente del individuo, de acuerdo con el funcionamiento natural del principio del karma; nadie juzga y nadie condena. El ímpetu que hemos establecido determinará el tipo de mundo en el que renaceremos.
El budismo no cuenta con una concepción de un ser creador o juez divino -esto se considera parte de nuestras propias proyecciones, con respecto a nuestras esperanzas y temores, que se encuentran basadas en nuestra necesidad por una figura paterna alentadora, que organice al cosmos.
Según la mentalidad budista permaneceremos en el estado de tormento por tanto tiempo y como hayan energías kármicas sin descargar que nos mantengan allí. La tradición sostiene que una vida en el infierno puede extenderse al cabo de muchos eones.
Ahora empecemos a analizar las concepciones infernales de los orientales; he creído conveniente empezar por el de la cultura china.
A) EL INFIERNO CHINO
El infierno chino es conocido con el nombre de Di-yu o literalmente "prisión terrenal"; Está ligeramente basado en el concepto budista del Naraka; en él, se juzgan a las almas de los pecadores y se las somete a un castigo, vemos la primera semejanza con el infierno de dante; otro punto de convergencia yace en el hecho de que los dos infiernos tiene una distribución por estancias, cada estancia respectiva a determinado castigo y pecado. La topografía del Di-
Yu es similar a la de la tierra, habiendo ríos, ciudades, campos y tribunales; Es un laberinto subterráneo distribuido en diez niveles y está dominado por Yama, el Rey del Infierno. En este lugar, se hace referencia no solo a jueces, sino también a guardias que velan de que todo esté en orden y de que no haya transgresores. Los condenados sí pueden ser perdonados: cuando el alma ya ha cumplido su condena y se haya purificada, ésta va hacia el décimo sector en el cuál el juez sien evaluando el grado de purificaron le concede permiso para reencarnar; luego de esto, el alma recibe del último guardián la bebida del olvido para borra su pasado y reanudar una nueva forma de existencia.

Nótese que la principal deferencia con el mundo reflejado por Dante yace en la posibilidad de salvación, en este sentido el infierno chino acopla el purgatorio y no lo trata de manera separada como lo hace el florentino; para los chinos el castigo es temporal y una vez que se ha cumplido con los padecimientos sentenciados por los jueces infernales, el muerto puede volver a la vida en forma de animal, planta o de nuevo ser humano, iniciando de esta manera el camino de transmigraciones; para Dante la salvación en el infierno es nula:
“POR MÍ SE VA HASTA LA CIUDAD DOLIENTE,
POR MÍ SE VA AL ETERNO SUFRIMIENTO,
POR MÍ SE VA A LA GENTE CONDENADA.
LA JUSTICIA MOVIÓ A MI ALTO ARQUITECTO.
HÍZOME LA DIVINA POTESTAD,
EL SABER SUMO Y EL AMOR PRIMERO.
ANTES DE MÍ NO FUE COSA CREADA
SINO LO ETERNO Y DURO ETERNAMENTE.
DEJAD, LOS QUE AQUÍ ENTRÁIS, TODA ESPERANZA
Canto III (Infierno)
Lo que más sorprende son las similitudes existentes en al organización: en las dos concepciones hay jueces: recuérdese al rey Minos; y hay guardianes: hacer memoria de Cerbero, de los centauros, de los minotauros, etc.; la topografía es bastante parecida: un mundo subterráneo, ríos, ciudades, etc. Los chinos también tienen un personaje que es el análogo de Lucifer, denominado con el nombre de Yama. El hecho más distante es el referido al agua del olvido; si bien en el infierno de dante el padecimiento es infinito, por lo que nunca se puede dar lugar olvido, el poeta ni siquiera en el paraíso hace mención a que el ser humano pierde la conciencia de lo que ha hecho en su vida terrenal, el ser humano carga con sus culpas y cuando llega a un estado superior podría decirse que las asimila y las convierte. La transmutación existe en el infierno de Dante pero esta se da en el mismo infierno, contrariamente del chino en el cuál las almas migran (este sería el término apropiado) a otras sustancias.
EL INFIERNO JAPONÉS
El infierno japonés, ha recibido influencia del budismo chino, pero en este punto hay que aclarar que el budismo en Japón dista del chino en varios aspectos, la cultura japonesa esta constantemente abierta a la mentalidad mundial pero siempre que acopla parte de ella la modifica y la adhiere a su cultura dándole rasgos propios, el hecho entonces de que haya una influencia china, no implica que su visión del infierno sea idéntica. Los japoneses formulan un mundo de ultratumba genial, bien elaborado, con detalles, con descripciones exactas de los castigos y con una fantasía sin precedentes y llegado a este punto me atrevo a decir que son superiores a la obra de Dante. De todas maneras, es necesario destacar que es tras la venida del budismo que se introduce la idea de recompensa o castigo después de la muerte.
Hay que destacar el hecho de que si bien es cierto la obra de Dante se asemeja al Corán, el Corán haya su influencia en oriente, por lo que Dante puede remontarse a estos lares.
Los japoneses cuentan con un libro de los muertos, al igual que los egipcios de nombre: Ojoyoshu ( una guía para la reencarnación en la tierra pura) y fue escrita por un monje llamado Genshin en 985; en ella, un viajero visita el inframundo y ve todo lo que acontece en el mismo, en esta obra el infierno se divide en ocho regiones de fuego y ocho regiones de hielo y nieve; es un infierno subterráneo, el primer nivel es conocido como el infierno de la justicia retributiva y se encuentra como a 8000 kilómetros del mundo mortal, aquí los pecadores se hacen pedazos entre si con garras de metal, se pueden encontrar castigos menos severos como ser cubiertos de barro y excremento o ser picado por millones de mosquitos mientras se es obligado a comer material fecal hirviente; el infierno más corto dura 12, 500, 000 años. El segundo es el infierno de la cuerda negra en el cual se encuentran ladrones y asesino los cuales son castigados con látigos de fuego; el tercer infierno es para las personas que han cometido violaciones. El cuarto nivel es el infierno de los gritos donde muy curiosamente se castiga a aquellos mercaderes que mezclaban sake con agua; esto fue considerado por Genshin un pecado terrible y los culpables debían de ser castigados con 404 enfermedades y miles de insectos que entran a sus cuerpos para comerse la piel, carne y huesos. El quinto nivel, "El Gran Infierno de los Gritos" es exactamente lo mismo salvo que el sufrimiento es diez veces mayor. Las personas son culpables de los mismos pecados que las del cuarto, pero ellas han mentido acerca de sus crímenes. El siguiente infierno es El Infierno de las llamas, es donde se convierte a las personas en una suerte de yakitori humano. Las personas son atravesadas con una barra al rojo vivo. El octavo nivel, el "Gran infierno del Sufrimiento Ilimitado" esta a dos milenios de profundidad, aquí se queman y son comidos vivos y arrojados desde las cimas de montañas de 80 Km. de alto a todos los que asesinaron, dejaron morir de sed a otros, para los niños que mataron a sus padres y para los que envenenaron.
El rey o emperador del Jigoku (infierno) se llama Enma-ho, y juzga las almas de los pecadoras de los hombres dándoles una de las dieciséis regiones de castigo, la hermana de Enma-Ho juzga a las mujeres. Un dato interesante es que los pecadores antes de ser juzgados ven relejados sus pecados a través de une espejo
Hay que ver ahora las semejanzas con el infierno de Dante, primero resalta el hecho de que hay una fuerza dual que maneja el infierno, igual que Lucifer, e igual que en el infierno chino, esto puede entenderse por la influencia del taoísmo en la filosofía japonesas y su creencia de que todo está dirigido y conformado por una fuerza contraria y complementaria; nuevamente vemos la necesidad de dividir el infierno en varios lugares dentro de los cuales se encuentra un grupo de pecadores con un tipo determinado de castigo. Una diferencia es el singular detallismo del infierno japonés, en él podemos encontrar medidas de tiempo, distancias, y sobretodo descripciones morbosamente minuciosas; otro factor importante es que a diferencia del infierno concebido por Dante, el infierno japonés causa terror, la lectura del Ojoyoshu provoca temor al más allá y los personajes en él descritos nos espantosan; en la Comedia se introducen diálogos fraternos, y otros elementos que se encargan de suavizar el contenido de la obra; en el caso del Ojoyoshu, estos elementos no existen, y el mundo subterráneo se manifiesta con suma crudeza. Otra semejanza es que en ambos libros el personaje principal es un viajero que visita el inframundo, podemos notar en el Ojoyoshu un Dante nipón surcando los confines de lo desconocido.
Un punto en el cuál se diferencia de la concepción del poeta florentino es que a salvación, al igual que ene. Infierno chino, se logra tras cumplir tu sentencia, y es más, puede ser acortada por medio de las plegarias y de la intersección de un buda. La pareja infernal en este sentido, tiene misericordia y brindan a los muertos oportunidade de redención.
En el Ojoyoshu abundan seres montuosos y aunque no parezca cierto, superan en número a los que aparecen en la comedia; la fantasía de los japoneses no tiene límites y crean un sin número de seres mágicos, grotescos, peculiares para llenar su visión de ultratumba.
En primer lugar hay que hablar sobre el Oni, que es un demonio, una especie de ogro. Su aspecto es humanoide y su vestuario solo consta de una especie de taparrabo, tiene cuernos y un tercer ojo.
Los Onis son los seres que se encuentran con más abundancia en el Jigoku y causan desgracias, enfermedades, hambrunas y muchas veces poseen a las personas. Llevan un garrote y aparecen montados en una carreta en llamas para apoderarse del alma de una persona que esta a punto de morir y que tiene malos sentimientos.
Los adivinos, y las personas especialmente virtuosas pueden detectar la presencia de estos ogros cuando se hayan cerca de ellos.
El Oni está presente tanto en el Jiguku como en el mundo mortal, este es un rasgo importante en comparación con los personajes de Dante los cuáles solo se encuentran en el inframundo
En segundo lugar se pueden clasificar los guerreros fantasmas cono los Shura (imagen izquierda) y los Tengu (imagen derecha); los Shura son espíritus enfurecidos que habitan el cielo y se reúnen para luchar entre ellos eternamente. Los Tengou son unos ogros alados de carácter colérico, se dividen en jefe Tengou y subordinaos del jefe Tengu. En tercer lugar voy a nombrar a los genio: el espíritu del trueno oni rojoy el espíritu del viento oni azul.
En Japón, los fantasmas son parte importante de la consolidación de su cultura y creencias, en verano se celebra la “fiesta de obón”, en la que el espíritu regresa a casa. Existen infinidad de fantasmas, cada uno con rasgos particulares que lo diferencian del resto, hay un espectro para cada momento, lugar y situación, siendo los japoneses muy imaginativos al momento de las descripciones.
Como ejemplo más conocido se puede mencionar al Kappa, un ser de piel verdosa que vive en los ríos y que solo puede ser derrotado si es que se destruye la bolsa de agua que lleva en la cabeza. Otros ejemplos son Futakuchi-Onna mujer de dos bocas, el niño de un solo ojo cuya finalidad solo es divertirse, y el BaKu, ser que se alimenta de las pesadillas de los seres humanos.
Ahora, luego de haber hecho un repaso por todo este mundo fantástico de seres de ultratumba, podemos deducir que los personajes en el libro de los muertos o en general, en la concepción de infierno de los japoneses superan en número a la también basta máquina de Dante Alighieri.
3) El Infierno Nórdico
El infierno nórdico es conocido con el nombre de Nifelheim o Niflheim, que significa Hogar de la niebla, El reino es morada de l diosa Hel, quien fue desterrada por Odín por considerarla un ser atroz. Una de las peculiaridades de este mundo es que hay un predominio de la materia fría, del hielo y la nieve. En este reino las personas padecen y es, en contraposición con el Valhala (especie de paraíso nórdico), un lugar de tormento de oscuridad y de tinieblas.
El reino está bajo tierra, al igual que todos los anteriormente descritos y su acceso era dificultoso y largo puesto que esta distanciado de todo signo de humanidad y se tení que recorrer los penosos caminos de las frías regiones del extremo norte. En el puente de cristal que llevaba hacia la entrada se encontraba el esqueleto de Modgud, quién pedía a los espíritus le pagar su pase con sangre. Los espíritus se movilizaban con las carretas y caballos que se habían quemado en su funeral, y los nórdicos colocaban a los muertos, los zapatos de Hel, unos zapatos especialmente resistentes para soportar la accidentada caminata que los esperaba tras la muerte. Luego de pasar el puente, los espíritus se encontraban con el bosque de acero, lleno de árboles con hojas de dicho material y luego de esto, se llegaban a las puertas de Hel, custodiada por un perro guardián de nombre Garm.

Dentro, se hallaban glaciares y ríos, como el río de Slid, en cuyas aguas rodaban espadas eternamente espadas. El palacio de la diosa Hel se llama Elvidner, que quiere decir miseria. Al reino de Hel llegaban todos aquellos que habían sido perjuros y criminales y los que habían muerto sin derramar sangre, de vejez y de enfermedad.
Los nórdicos durante su vida, intentaban realizar actos heroicos, puesto que de esta manera podrían tras su muerte gozar de la bienvenida en el Valhala, que como ya lo dije era una especie de paraíso, es por esto que no dudaban en arrojarse de precipicios o las mujeres, caer sobre las espadas que les eran entregadas el día de su boda, para morir y de esta forma seguir al alma de sus esposos valientes. Las almas impuras por el contrario, eran desterradas a Nastrond (la ribera de los cadáveres), donde eran castigados para luego ser arrojados a la caldera Hvergelmir donde la serpiente Nidhung, hermana de la diosa Hel dejaba de mascar el árbol Yggdrasil (que explicaré más adelante) para alimentarse de los condenados.
Un palacio que se erige
lejos del Sol
en Nastrond;
sus puertas dan hacia el Norte,
gotas de veneno caen
de sus aberturas;
entretejido está ese palacio
con lomos de serpiente.
Allí vio ella vadear
las lentas corrientes
a los hombres sedientos de sangre
y a los perjuros,
y a aquellos que seducen los oídos
de las esposas de los demás.
Allí absorbe Nidhug
los cadáveres de los muertos.
(Edda de Semund).
Hel interfería además en el mundo de los vivos, puesto que recorría la tierra trayendo pestes y hambruna; además de esto, los muertos de vez en cuando podían obtener permiso para retornar por breves momentos al mundo de los mortales.
Ahora, si comparamos el infierno nórdico con el de Dante podemos encontrar que en ambos se da un predominio de la materia fría y de la oscuridad, una característica que los hace peculiares frente a los demás infiernos que daban mucho lugar a las llamas y a las sustancias hirvientes como por ejemplo el islámico. La diosa Hel es mujer, esto es una diferencia, puesto que Lucifer, se podría visualizar como un ser masculino; una semejanza curiosísima es que en ambos infiernos existe un perro guardián, en el caso de la comedia es Cerbero y en el caso del Nifelheim es Garm. Otro dato importante de analizar es que el infierno nórdico tiene una ubicación real, no es como el de Dante que se desarrolla en otro plano, sino que incluso un mortal, puede acceder, o mejor dicho, encontrar tal reino si es que llega a dar con su ubicación. Para llegar al Valhala y no ser condenado no bastaba con tener una vida justa, sino que a esto se le añadía el haber muerto heroicamente, derramando sangre, asunto que Dante cuestiona, puesto que éste juzga a los asesinos y suicidas en uno de sus círculos, y puesto que para hacer una acto heroico, en la mayoría de los casos se debía recurrir a ambas cosas; en todo caso los nórdicos no verían el suicidio como un suicidio, al contrario, lo visualizarían( si la situación y el momento lo permiten) como una inmolación. La geografía y el constante de los ríos se dan también en este reino.
El infierno de Dante, su purgatorio y su paraíso están hasta ciertos puntos ligados unos a otros, la organización de cada uno de ellos es además interesantísima, bueno, los nórdicos también relacionaron los planos de sus mundos y los unen por medio de la representación de un árbol de proporciones gigantescas llamado: Yggdrasil.
Un fresno que conozco resiste,
Su nombre es Yggdrasil.
Un árbol inmenso, cubierto
Por la blanca arena.
Desde ahí viene el rocío
Que cae sobre los valles.
Se erige siempre verde
Sobre el pozo de Urdal
( Tor Åge Bringsværd)
Podemos explicar la configuración de este inmenso árbol cósmico de la siguiente forma:
El árbol de Yggdrasil fue plantado por los dioses en Asgard, lugar que se encuentra situado en Midgard; este árbol cósmico une mediante sus raíces los tres mundos principales: Asgard, que es el plano superior, Jotunheimen, que es el plano medio, donde se encuentran los humanos y Niflheimen, que es el plano inferior, el cual podemos interpretar como su infierno
“Este inmenso fresno de dimensiones prodigiosas sostiene al universo. Es el Siempre Verde, el Poderoso Fresno, la fuente de la vida, vida eterna y polo axial del mundo. No existe mito alguno sobre su creación, por lo que es entonces fuente primordial, es el Árbol de la Existencia y nutre todo la vida.”
Extracto del artículo "El bosque sagrado", de Elizabeth Ross, publicado en enero del 2002 en Acento, la voz de Michoacán
Se puede entender entonces que Mientras este ser esté vivo, el mundo como lo conocemos no desaparecerá ni ingresará en un estado de caos.
Otra vez me hallo en la necesidad de citar el artículo de Elizabeth Ross:
“El poder de todos los símbolos contenidos en Yggdrasil es considerable. Une cielo y tierra, se sumerge en las profundidades. Es cobijo, refugio y hogar de la naturaleza. Es a la vez pasado, presente y futuro y como todo arquetipo, tiene sus partes oscuras y luminosas, pero en principio es la renovación de la vida, manteniendo el balance entre las fuerzas constructivas y de destrucción, fuerzas moralmente neutras e inevitablemente necesarias. La cosmogonía de este Fresno del Mundo es mucho más compleja de lo que puedo contar en este texto.”
Llegado a este punto podemos apreciar que los reinos concebidos por la cultura nórdica están físicamente unidos, no en la misma mediada que en el infierno de Dante, que más bien los separa un poco; además, el árbol representado es un ser vivo que une los mundos, en cambie en Dante, no hay nada que se parezca a esto. El ser que encierra hasta cierto modo el universo es Dios, pero éste se encuentra en el paraíso mas su presencia no se hace notar tanto en el infierno, salvo por los ángeles que a el envía para mantener el orden. La metáfora del frondoso árbol cósmico de Yggdrasil es infinitamente superior a la concepción y unión de los mundos concebido por Dante.
4) Infierno Islámico
El Corán, libro sagrado del Islam, nos narra la travesía de Mahoma por el paraíso y el infierno, las similitudes entre el viaje de Mahoma y el de Dante saltan a las vista desde el comienzo del mismo; Dante es guiado por Virgilio mientras Mahoma por el arcángel Gabriel, dándose en los dos casos un ente que hace de guía. Puedo atreverme a hacer una comparación en la bestia que sirve de transporte en ambos textos, en la Comedia, euiste un monstruo llamado Gerión que lo transporta hacia el infierno, y en el Corán se hace referencia a un ser mezcla de asno, hombre y pájaro que transporta a Mahoma al cielo, la diferencia yace que en la comedia es un descenso y en el Corán un ascenso, además de que en el primer caso se podría decir que es un planeo más que un vuelo; en lo que sí convergen ambos es en la fusión de animales para la configuración de un solo ser.
Una diferencia es que el predominio del fuego es recurrente y protagónico en el Corán, no siéndolo en la Comedia, en la que solo tiene unas cuantas menciones, puesto que se trata de un infierno más bien frío; en todo caso en lo que sí concuerdan ambos con respecto al ambiente es la oscuridad, las tinieblas, estando Satán en el lugar más oscuro de todo el mundo de ultratumba.
Existe una división del infierno en ambos casos, dividiéndose el infierno de la tradición islámica en 7 tierras subterráneas. La existencia de entradas y de puertas es un elemento de unión entre Dante y el Corán. Los castigados en el infierno descrito por el islamismo son básicamente los mismos del infierno de Dante: fraudulentos, adúlteros, lujuriosos, idólatras, etc.
Al hombre se lo priva de la relación con Dios y de este modo se lo priva de la felicidad, se opta por un infierno materialista como es el de la tortura física que llega a la aberración y el sadismo.
Hay que notar entonces que es muy probable que Dante, el escritor del magnífico poema la comedia, se haya visto influenciado por la cultura islámica, incluyendo modos de pensar propios del Corán y hasta algunas alegorías expuestas en el mismo.
5) INFIERNO AZTECA
Ya he mencionado varias concepciones de infiernos, pero me falta uno que represente a la cultura americana, en este caso, he decidido trabajar con la concepción azteca, puesto que me es la más interesante de todas.
El Mictlan se encontraba muy al norte. y era el lugar a donde iban aquellas personas que no morían ni en guerra, ni de parto, ni por muerte relacionada con el agua. Al Mictlán iban los muertos comunes.
Se tenía que hacer un duro viaje para llegar el descanso eterno, Para llegar al descanso eterno, Xólotl (Perro gigante), les ayudaba en el viaje, El Mictlan estaba formado de 9 lugares, 8 tenían retos para los muertos y en el 9 se podía alcanzar el descanso eterno.
“Presidiendo el Mictlán estaba Mictlantecuhtli, quien tenía su contraparte femenina, llamada Mictlancíhuatl. Se les representa con el rostro calavérico y en ocasiones con partes de su cuerpo encarnadas. Sus partes óseas aparecen decoradas con círculos amarillos con puntos rojos, que simulan huellas de descarnación. Su existencia en un lugar frío y oscuro como el Mictlán no tiene ninguna connotación moral ni se trata de un diablo, es simplemente el que guarda los huesos de los muertos comunes. Imagen del Códice Borbónico”
(Museo del Templo Mayor, Instituto Nacional de Antropología e Historia, México.
página suplementaria del Seminario #8, Centro Histórico, Cuauhtémoc, México, D.F. 06060)
las nueve dimensiones del Mictlan eran:
1.- Apanohuaia o Itzcuintlan: Aquí había un río caudaloso, la única manera de cruzarlo era con ayuda de Xólotl. Si en vida no se había tratado bien a algún perro, el muerto se quedaba en esta dimensión por la eternidad.
2.- Tepectli Monamictlan: Lugar donde los cerros chocan entre si.
3.- Iztepetl: Cerro de navajas, erizado de pedernales.
4.- Izteecayan: Lugar en el que sopla el viento de navajas, ocho colinas donde nieva constantemente
5.- Paniecatacoyan: Aquí los cuerpos flotan como banderas, aquí empieza una zona desértica fría. 6.- Timiminaloayan: Sendero el cual se tiene que atravesar, sufriendo la acaecida de flechas lanzadas por manos invisibles.
7.- Teocoyocualloa: Lugar donde las fieras se alimentan de los corazones. En este pasaje, una fiera salvaje abría el pecho del difunto para comerle el corazón
8.- Izmictlan Apochcalolca: camino de niebla, en este lugar; done se tenían que atravesar nueve ríos.
9.- Chicunamictlan: Aquí las almas encontraban el descanso eterno.
El viaje que dura cuatro años culmina con la liberación del tonalli o alma.
La labor de dirigir el Mictlan residía en dos entes, uno masculino y otro femenino, en una fuerza dual: El rey Mictlantecuhtli, y la reina Mictecacíhuatl.
Nuevamente vemos la figura del perro en el infierno, pero esta vez no es ser atormentador como en las otras culturas, sino todo lo contrario, es un can que ayuda a las personas a alcanzar su descanso y su felicidad, no es un ente maligno. La más clara diferencia entre el infierno de Dante y el Mictlan es que en el segundo las personas tiene que pasar por todas las estancias, no hay círculos para determinados pecados, sino que todos tienen que recorrer todas las estancias y padecer las mismas pruebas antes de llegar al izmictlan, en este punto también se puede destacar el hecho de que todos están destinados a la salvación, sea la clase de persona que sea. La otra semejanza es el frío y la oscuridad antes que el fuego que reinan en este plano, un reiterativo que ya hemos observado en la cultura oriental y en la nórdica.
La palabra infierno proviene del latín infernum,1 "inferior".
(rae)
La concepción del infierno no le es única al cristianismo, podemos enumerar una serie de lugares que cumplen con las facultades infernales si indagamos en la historia de las antiguas civilizaciones sea de oriente como de occidente. Se puede afirmar que el hecho mismo de que casi todas las culturas, cuenten

En el presente ensayo lo que me apremia es elaborar una breve comparación entre el infierno de dante y los infiernos concebidos por el Islamismo, por la cultura japonesa, la china y por la civilización azteca y nórdica; enfatizaré en las semejanzas tanto como en las diferencias, creyendo importante los dos pasos para conocer hasta qué punto Dante utiliza nuevas ideas y hasta que punto su pensamiento se asemeja al de otras culturas.
En primer lugar hay que establecer el porqué de las divergencia en la manera de ver el infierno, el principal motivo está relacionado con la manera en que las culturas entienden el transcurrir del tiempo ¿y cómo esto puede influenciar en una concepción del mundo de ultratumba?, pues muy simple, el infierno es un lugar donde se padece y seis se padece entonces se debe especificar el tiempo de tal padecimiento, ahora, en este punto, las culturas con una historia lineal lo conciben como infinito y las religiones con una historia cíclica suelen mostrar el infierno como un período intermediario entre encarnaciones (por ejemplo, el Di- Yu chino); dándose de esta manera las principales diferencias.
Para seguir con el desarrollo de este trabajo he creído conveniente ir abordando cada infierno a tratar en orden, insertando en cada uno los respectivos comentarios referidos a las semejanzas y diferencias con el infierno de Dante.
Empecemos por Dante mismo: En el infierno compuesto por el florentino podemos resumir la influencia de dos tradiciones: la cristiana y la grecolatina; el mundo del más allá mediante alegorías inteligentes y formas que solo el poeta puedo diseñar.
Su infierno es un enorme abismo en forma de cono invertido y está dividido en círculos o estancias, en cada círculo se hayan designados los condenados según sus tipos de pecado, teniendo los pecados más perdonables por Dios lugares menos cercanos al centro de la tierra y con padecimientos menores con respecto a aquellos que cometieron los pecados más terribles. Los hombres en este lugar transmutan en otros seres y en este punto se puede apreciar las regresiones que hacen los pecadores al transmutar en animales, plantas y hasta minerales, como muy bien lo señala Ángel crespo en su libro “dante y su obra”. Otra característica es que las almas están dotadas de cuerpo, ya que para padecer deben estar expuestos al mundo sensorial. Finalmente Dante nos muestra un infierno que en el que la salvación es inexistente: las almas están condenadas por toda la eternidad sin la más mínima esperanza de dejar atrás su calvario. En el infierno de Dante no hay quién juzgue sino que son los mismos humanos quienes eligen ir a tal lugar, puesto que el pecado para el poeta es una elección.
Antes de comenzar con la descripción tanto del Infierno chino como del infierno japonés, creo conveniente trazar a grandes rasgos las percepciones que tenía el budismo sobre este mundo, debido a que, ambas culturas, se vieron influenciadas enormemente por dicha religión.
En primer lugar se muestra como un lugar de dolor y tormento, hay tanto lugares calientes como lugares fríos, pero los lugares de mayor sufrimiento son los fríos.
A pesar de que las representaciones budistas tradicionales del infierno guardan un cercano parecido con aquellas del cristianismo, el concepto del infierno difiere de su equivalente cristiano en dos aspectos importantes: el infierno no es un castigo y su duración no es infinita. Cada mundo es la objetivización de la propia mente del individuo, de acuerdo con el funcionamiento natural del principio del karma; nadie juzga y nadie condena. El ímpetu que hemos establecido determinará el tipo de mundo en el que renaceremos.
El budismo no cuenta con una concepción de un ser creador o juez divino -esto se considera parte de nuestras propias proyecciones, con respecto a nuestras esperanzas y temores, que se encuentran basadas en nuestra necesidad por una figura paterna alentadora, que organice al cosmos.
Según la mentalidad budista permaneceremos en el estado de tormento por tanto tiempo y como hayan energías kármicas sin descargar que nos mantengan allí. La tradición sostiene que una vida en el infierno puede extenderse al cabo de muchos eones.
Ahora empecemos a analizar las concepciones infernales de los orientales; he creído conveniente empezar por el de la cultura china.
A) EL INFIERNO CHINO
El infierno chino es conocido con el nombre de Di-yu o literalmente "prisión terrenal"; Está ligeramente basado en el concepto budista del Naraka; en él, se juzgan a las almas de los pecadores y se las somete a un castigo, vemos la primera semejanza con el infierno de dante; otro punto de convergencia yace en el hecho de que los dos infiernos tiene una distribución por estancias, cada estancia respectiva a determinado castigo y pecado. La topografía del Di-
Yu es similar a la de la tierra, habiendo ríos, ciudades, campos y tribunales; Es un laberinto subterráneo distribuido en diez niveles y está dominado por Yama, el Rey del Infierno. En este lugar, se hace referencia no solo a jueces, sino también a guardias que velan de que todo esté en orden y de que no haya transgresores. Los condenados sí pueden ser perdonados: cuando el alma ya ha cumplido su condena y se haya purificada, ésta va hacia el décimo sector en el cuál el juez sien evaluando el grado de purificaron le concede permiso para reencarnar; luego de esto, el alma recibe del último guardián la bebida del olvido para borra su pasado y reanudar una nueva forma de existencia.

Nótese que la principal deferencia con el mundo reflejado por Dante yace en la posibilidad de salvación, en este sentido el infierno chino acopla el purgatorio y no lo trata de manera separada como lo hace el florentino; para los chinos el castigo es temporal y una vez que se ha cumplido con los padecimientos sentenciados por los jueces infernales, el muerto puede volver a la vida en forma de animal, planta o de nuevo ser humano, iniciando de esta manera el camino de transmigraciones; para Dante la salvación en el infierno es nula:
“POR MÍ SE VA HASTA LA CIUDAD DOLIENTE,
POR MÍ SE VA AL ETERNO SUFRIMIENTO,
POR MÍ SE VA A LA GENTE CONDENADA.
LA JUSTICIA MOVIÓ A MI ALTO ARQUITECTO.
HÍZOME LA DIVINA POTESTAD,
EL SABER SUMO Y EL AMOR PRIMERO.
ANTES DE MÍ NO FUE COSA CREADA
SINO LO ETERNO Y DURO ETERNAMENTE.
DEJAD, LOS QUE AQUÍ ENTRÁIS, TODA ESPERANZA
Canto III (Infierno)
Lo que más sorprende son las similitudes existentes en al organización: en las dos concepciones hay jueces: recuérdese al rey Minos; y hay guardianes: hacer memoria de Cerbero, de los centauros, de los minotauros, etc.; la topografía es bastante parecida: un mundo subterráneo, ríos, ciudades, etc. Los chinos también tienen un personaje que es el análogo de Lucifer, denominado con el nombre de Yama. El hecho más distante es el referido al agua del olvido; si bien en el infierno de dante el padecimiento es infinito, por lo que nunca se puede dar lugar olvido, el poeta ni siquiera en el paraíso hace mención a que el ser humano pierde la conciencia de lo que ha hecho en su vida terrenal, el ser humano carga con sus culpas y cuando llega a un estado superior podría decirse que las asimila y las convierte. La transmutación existe en el infierno de Dante pero esta se da en el mismo infierno, contrariamente del chino en el cuál las almas migran (este sería el término apropiado) a otras sustancias.
EL INFIERNO JAPONÉS
El infierno japonés, ha recibido influencia del budismo chino, pero en este punto hay que aclarar que el budismo en Japón dista del chino en varios aspectos, la cultura japonesa esta constantemente abierta a la mentalidad mundial pero siempre que acopla parte de ella la modifica y la adhiere a su cultura dándole rasgos propios, el hecho entonces de que haya una influencia china, no implica que su visión del infierno sea idéntica. Los japoneses formulan un mundo de ultratumba genial, bien elaborado, con detalles, con descripciones exactas de los castigos y con una fantasía sin precedentes y llegado a este punto me atrevo a decir que son superiores a la obra de Dante. De todas maneras, es necesario destacar que es tras la venida del budismo que se introduce la idea de recompensa o castigo después de la muerte.
Hay que destacar el hecho de que si bien es cierto la obra de Dante se asemeja al Corán, el Corán haya su influencia en oriente, por lo que Dante puede remontarse a estos lares.
Los japoneses cuentan con un libro de los muertos, al igual que los egipcios de nombre: Ojoyoshu ( una guía para la reencarnación en la tierra pura) y fue escrita por un monje llamado Genshin en 985; en ella, un viajero visita el inframundo y ve todo lo que acontece en el mismo, en esta obra el infierno se divide en ocho regiones de fuego y ocho regiones de hielo y nieve; es un infierno subterráneo, el primer nivel es conocido como el infierno de la justicia retributiva y se encuentra como a 8000 kilómetros del mundo mortal, aquí los pecadores se hacen pedazos entre si con garras de metal, se pueden encontrar castigos menos severos como ser cubiertos de barro y excremento o ser picado por millones de mosquitos mientras se es obligado a comer material fecal hirviente; el infierno más corto dura 12, 500, 000 años. El segundo es el infierno de la cuerda negra en el cual se encuentran ladrones y asesino los cuales son castigados con látigos de fuego; el tercer infierno es para las personas que han cometido violaciones. El cuarto nivel es el infierno de los gritos donde muy curiosamente se castiga a aquellos mercaderes que mezclaban sake con agua; esto fue considerado por Genshin un pecado terrible y los culpables debían de ser castigados con 404 enfermedades y miles de insectos que entran a sus cuerpos para comerse la piel, carne y huesos. El quinto nivel, "El Gran Infierno de los Gritos" es exactamente lo mismo salvo que el sufrimiento es diez veces mayor. Las personas son culpables de los mismos pecados que las del cuarto, pero ellas han mentido acerca de sus crímenes. El siguiente infierno es El Infierno de las llamas, es donde se convierte a las personas en una suerte de yakitori humano. Las personas son atravesadas con una barra al rojo vivo. El octavo nivel, el "Gran infierno del Sufrimiento Ilimitado" esta a dos milenios de profundidad, aquí se queman y son comidos vivos y arrojados desde las cimas de montañas de 80 Km. de alto a todos los que asesinaron, dejaron morir de sed a otros, para los niños que mataron a sus padres y para los que envenenaron.
El rey o emperador del Jigoku (infierno) se llama Enma-ho, y juzga las almas de los pecadoras de los hombres dándoles una de las dieciséis regiones de castigo, la hermana de Enma-Ho juzga a las mujeres. Un dato interesante es que los pecadores antes de ser juzgados ven relejados sus pecados a través de une espejo
Hay que ver ahora las semejanzas con el infierno de Dante, primero resalta el hecho de que hay una fuerza dual que maneja el infierno, igual que Lucifer, e igual que en el infierno chino, esto puede entenderse por la influencia del taoísmo en la filosofía japonesas y su creencia de que todo está dirigido y conformado por una fuerza contraria y complementaria; nuevamente vemos la necesidad de dividir el infierno en varios lugares dentro de los cuales se encuentra un grupo de pecadores con un tipo determinado de castigo. Una diferencia es el singular detallismo del infierno japonés, en él podemos encontrar medidas de tiempo, distancias, y sobretodo descripciones morbosamente minuciosas; otro factor importante es que a diferencia del infierno concebido por Dante, el infierno japonés causa terror, la lectura del Ojoyoshu provoca temor al más allá y los personajes en él descritos nos espantosan; en la Comedia se introducen diálogos fraternos, y otros elementos que se encargan de suavizar el contenido de la obra; en el caso del Ojoyoshu, estos elementos no existen, y el mundo subterráneo se manifiesta con suma crudeza. Otra semejanza es que en ambos libros el personaje principal es un viajero que visita el inframundo, podemos notar en el Ojoyoshu un Dante nipón surcando los confines de lo desconocido.
Un punto en el cuál se diferencia de la concepción del poeta florentino es que a salvación, al igual que ene. Infierno chino, se logra tras cumplir tu sentencia, y es más, puede ser acortada por medio de las plegarias y de la intersección de un buda. La pareja infernal en este sentido, tiene misericordia y brindan a los muertos oportunidade de redención.
En el Ojoyoshu abundan seres montuosos y aunque no parezca cierto, superan en número a los que aparecen en la comedia; la fantasía de los japoneses no tiene límites y crean un sin número de seres mágicos, grotescos, peculiares para llenar su visión de ultratumba.
En primer lugar hay que hablar sobre el Oni, que es un demonio, una especie de ogro. Su aspecto es humanoide y su vestuario solo consta de una especie de taparrabo, tiene cuernos y un tercer ojo.
Los Onis son los seres que se encuentran con más abundancia en el Jigoku y causan desgracias, enfermedades, hambrunas y muchas veces poseen a las personas. Llevan un garrote y aparecen montados en una carreta en llamas para apoderarse del alma de una persona que esta a punto de morir y que tiene malos sentimientos.
Los adivinos, y las personas especialmente virtuosas pueden detectar la presencia de estos ogros cuando se hayan cerca de ellos.
El Oni está presente tanto en el Jiguku como en el mundo mortal, este es un rasgo importante en comparación con los personajes de Dante los cuáles solo se encuentran en el inframundo
En segundo lugar se pueden clasificar los guerreros fantasmas cono los Shura (imagen izquierda) y los Tengu (imagen derecha); los Shura son espíritus enfurecidos que habitan el cielo y se reúnen para luchar entre ellos eternamente. Los Tengou son unos ogros alados de carácter colérico, se dividen en jefe Tengou y subordinaos del jefe Tengu. En tercer lugar voy a nombrar a los genio: el espíritu del trueno oni rojoy el espíritu del viento oni azul.
En Japón, los fantasmas son parte importante de la consolidación de su cultura y creencias, en verano se celebra la “fiesta de obón”, en la que el espíritu regresa a casa. Existen infinidad de fantasmas, cada uno con rasgos particulares que lo diferencian del resto, hay un espectro para cada momento, lugar y situación, siendo los japoneses muy imaginativos al momento de las descripciones.
Como ejemplo más conocido se puede mencionar al Kappa, un ser de piel verdosa que vive en los ríos y que solo puede ser derrotado si es que se destruye la bolsa de agua que lleva en la cabeza. Otros ejemplos son Futakuchi-Onna mujer de dos bocas, el niño de un solo ojo cuya finalidad solo es divertirse, y el BaKu, ser que se alimenta de las pesadillas de los seres humanos.
Ahora, luego de haber hecho un repaso por todo este mundo fantástico de seres de ultratumba, podemos deducir que los personajes en el libro de los muertos o en general, en la concepción de infierno de los japoneses superan en número a la también basta máquina de Dante Alighieri.
3) El Infierno Nórdico
El infierno nórdico es conocido con el nombre de Nifelheim o Niflheim, que significa Hogar de la niebla, El reino es morada de l diosa Hel, quien fue desterrada por Odín por considerarla un ser atroz. Una de las peculiaridades de este mundo es que hay un predominio de la materia fría, del hielo y la nieve. En este reino las personas padecen y es, en contraposición con el Valhala (especie de paraíso nórdico), un lugar de tormento de oscuridad y de tinieblas.
El reino está bajo tierra, al igual que todos los anteriormente descritos y su acceso era dificultoso y largo puesto que esta distanciado de todo signo de humanidad y se tení que recorrer los penosos caminos de las frías regiones del extremo norte. En el puente de cristal que llevaba hacia la entrada se encontraba el esqueleto de Modgud, quién pedía a los espíritus le pagar su pase con sangre. Los espíritus se movilizaban con las carretas y caballos que se habían quemado en su funeral, y los nórdicos colocaban a los muertos, los zapatos de Hel, unos zapatos especialmente resistentes para soportar la accidentada caminata que los esperaba tras la muerte. Luego de pasar el puente, los espíritus se encontraban con el bosque de acero, lleno de árboles con hojas de dicho material y luego de esto, se llegaban a las puertas de Hel, custodiada por un perro guardián de nombre Garm.

Dentro, se hallaban glaciares y ríos, como el río de Slid, en cuyas aguas rodaban espadas eternamente espadas. El palacio de la diosa Hel se llama Elvidner, que quiere decir miseria. Al reino de Hel llegaban todos aquellos que habían sido perjuros y criminales y los que habían muerto sin derramar sangre, de vejez y de enfermedad.
Los nórdicos durante su vida, intentaban realizar actos heroicos, puesto que de esta manera podrían tras su muerte gozar de la bienvenida en el Valhala, que como ya lo dije era una especie de paraíso, es por esto que no dudaban en arrojarse de precipicios o las mujeres, caer sobre las espadas que les eran entregadas el día de su boda, para morir y de esta forma seguir al alma de sus esposos valientes. Las almas impuras por el contrario, eran desterradas a Nastrond (la ribera de los cadáveres), donde eran castigados para luego ser arrojados a la caldera Hvergelmir donde la serpiente Nidhung, hermana de la diosa Hel dejaba de mascar el árbol Yggdrasil (que explicaré más adelante) para alimentarse de los condenados.
Un palacio que se erige
lejos del Sol
en Nastrond;
sus puertas dan hacia el Norte,
gotas de veneno caen
de sus aberturas;
entretejido está ese palacio
con lomos de serpiente.
Allí vio ella vadear
las lentas corrientes
a los hombres sedientos de sangre
y a los perjuros,
y a aquellos que seducen los oídos
de las esposas de los demás.
Allí absorbe Nidhug
los cadáveres de los muertos.
(Edda de Semund).
Hel interfería además en el mundo de los vivos, puesto que recorría la tierra trayendo pestes y hambruna; además de esto, los muertos de vez en cuando podían obtener permiso para retornar por breves momentos al mundo de los mortales.
Ahora, si comparamos el infierno nórdico con el de Dante podemos encontrar que en ambos se da un predominio de la materia fría y de la oscuridad, una característica que los hace peculiares frente a los demás infiernos que daban mucho lugar a las llamas y a las sustancias hirvientes como por ejemplo el islámico. La diosa Hel es mujer, esto es una diferencia, puesto que Lucifer, se podría visualizar como un ser masculino; una semejanza curiosísima es que en ambos infiernos existe un perro guardián, en el caso de la comedia es Cerbero y en el caso del Nifelheim es Garm. Otro dato importante de analizar es que el infierno nórdico tiene una ubicación real, no es como el de Dante que se desarrolla en otro plano, sino que incluso un mortal, puede acceder, o mejor dicho, encontrar tal reino si es que llega a dar con su ubicación. Para llegar al Valhala y no ser condenado no bastaba con tener una vida justa, sino que a esto se le añadía el haber muerto heroicamente, derramando sangre, asunto que Dante cuestiona, puesto que éste juzga a los asesinos y suicidas en uno de sus círculos, y puesto que para hacer una acto heroico, en la mayoría de los casos se debía recurrir a ambas cosas; en todo caso los nórdicos no verían el suicidio como un suicidio, al contrario, lo visualizarían( si la situación y el momento lo permiten) como una inmolación. La geografía y el constante de los ríos se dan también en este reino.
El infierno de Dante, su purgatorio y su paraíso están hasta ciertos puntos ligados unos a otros, la organización de cada uno de ellos es además interesantísima, bueno, los nórdicos también relacionaron los planos de sus mundos y los unen por medio de la representación de un árbol de proporciones gigantescas llamado: Yggdrasil.
Un fresno que conozco resiste,
Su nombre es Yggdrasil.
Un árbol inmenso, cubierto
Por la blanca arena.
Desde ahí viene el rocío
Que cae sobre los valles.
Se erige siempre verde
Sobre el pozo de Urdal
( Tor Åge Bringsværd)
Podemos explicar la configuración de este inmenso árbol cósmico de la siguiente forma:
El árbol de Yggdrasil fue plantado por los dioses en Asgard, lugar que se encuentra situado en Midgard; este árbol cósmico une mediante sus raíces los tres mundos principales: Asgard, que es el plano superior, Jotunheimen, que es el plano medio, donde se encuentran los humanos y Niflheimen, que es el plano inferior, el cual podemos interpretar como su infierno
“Este inmenso fresno de dimensiones prodigiosas sostiene al universo. Es el Siempre Verde, el Poderoso Fresno, la fuente de la vida, vida eterna y polo axial del mundo. No existe mito alguno sobre su creación, por lo que es entonces fuente primordial, es el Árbol de la Existencia y nutre todo la vida.”
Extracto del artículo "El bosque sagrado", de Elizabeth Ross, publicado en enero del 2002 en Acento, la voz de Michoacán
Se puede entender entonces que Mientras este ser esté vivo, el mundo como lo conocemos no desaparecerá ni ingresará en un estado de caos.
Otra vez me hallo en la necesidad de citar el artículo de Elizabeth Ross:
“El poder de todos los símbolos contenidos en Yggdrasil es considerable. Une cielo y tierra, se sumerge en las profundidades. Es cobijo, refugio y hogar de la naturaleza. Es a la vez pasado, presente y futuro y como todo arquetipo, tiene sus partes oscuras y luminosas, pero en principio es la renovación de la vida, manteniendo el balance entre las fuerzas constructivas y de destrucción, fuerzas moralmente neutras e inevitablemente necesarias. La cosmogonía de este Fresno del Mundo es mucho más compleja de lo que puedo contar en este texto.”
Llegado a este punto podemos apreciar que los reinos concebidos por la cultura nórdica están físicamente unidos, no en la misma mediada que en el infierno de Dante, que más bien los separa un poco; además, el árbol representado es un ser vivo que une los mundos, en cambie en Dante, no hay nada que se parezca a esto. El ser que encierra hasta cierto modo el universo es Dios, pero éste se encuentra en el paraíso mas su presencia no se hace notar tanto en el infierno, salvo por los ángeles que a el envía para mantener el orden. La metáfora del frondoso árbol cósmico de Yggdrasil es infinitamente superior a la concepción y unión de los mundos concebido por Dante.
4) Infierno Islámico
El Corán, libro sagrado del Islam, nos narra la travesía de Mahoma por el paraíso y el infierno, las similitudes entre el viaje de Mahoma y el de Dante saltan a las vista desde el comienzo del mismo; Dante es guiado por Virgilio mientras Mahoma por el arcángel Gabriel, dándose en los dos casos un ente que hace de guía. Puedo atreverme a hacer una comparación en la bestia que sirve de transporte en ambos textos, en la Comedia, euiste un monstruo llamado Gerión que lo transporta hacia el infierno, y en el Corán se hace referencia a un ser mezcla de asno, hombre y pájaro que transporta a Mahoma al cielo, la diferencia yace que en la comedia es un descenso y en el Corán un ascenso, además de que en el primer caso se podría decir que es un planeo más que un vuelo; en lo que sí convergen ambos es en la fusión de animales para la configuración de un solo ser.
Una diferencia es que el predominio del fuego es recurrente y protagónico en el Corán, no siéndolo en la Comedia, en la que solo tiene unas cuantas menciones, puesto que se trata de un infierno más bien frío; en todo caso en lo que sí concuerdan ambos con respecto al ambiente es la oscuridad, las tinieblas, estando Satán en el lugar más oscuro de todo el mundo de ultratumba.
Existe una división del infierno en ambos casos, dividiéndose el infierno de la tradición islámica en 7 tierras subterráneas. La existencia de entradas y de puertas es un elemento de unión entre Dante y el Corán. Los castigados en el infierno descrito por el islamismo son básicamente los mismos del infierno de Dante: fraudulentos, adúlteros, lujuriosos, idólatras, etc.
Al hombre se lo priva de la relación con Dios y de este modo se lo priva de la felicidad, se opta por un infierno materialista como es el de la tortura física que llega a la aberración y el sadismo.
Hay que notar entonces que es muy probable que Dante, el escritor del magnífico poema la comedia, se haya visto influenciado por la cultura islámica, incluyendo modos de pensar propios del Corán y hasta algunas alegorías expuestas en el mismo.
5) INFIERNO AZTECA
Ya he mencionado varias concepciones de infiernos, pero me falta uno que represente a la cultura americana, en este caso, he decidido trabajar con la concepción azteca, puesto que me es la más interesante de todas.
El Mictlan se encontraba muy al norte. y era el lugar a donde iban aquellas personas que no morían ni en guerra, ni de parto, ni por muerte relacionada con el agua. Al Mictlán iban los muertos comunes.
Se tenía que hacer un duro viaje para llegar el descanso eterno, Para llegar al descanso eterno, Xólotl (Perro gigante), les ayudaba en el viaje, El Mictlan estaba formado de 9 lugares, 8 tenían retos para los muertos y en el 9 se podía alcanzar el descanso eterno.
“Presidiendo el Mictlán estaba Mictlantecuhtli, quien tenía su contraparte femenina, llamada Mictlancíhuatl. Se les representa con el rostro calavérico y en ocasiones con partes de su cuerpo encarnadas. Sus partes óseas aparecen decoradas con círculos amarillos con puntos rojos, que simulan huellas de descarnación. Su existencia en un lugar frío y oscuro como el Mictlán no tiene ninguna connotación moral ni se trata de un diablo, es simplemente el que guarda los huesos de los muertos comunes. Imagen del Códice Borbónico”
(Museo del Templo Mayor, Instituto Nacional de Antropología e Historia, México.
página suplementaria del Seminario #8, Centro Histórico, Cuauhtémoc, México, D.F. 06060)
las nueve dimensiones del Mictlan eran:
1.- Apanohuaia o Itzcuintlan: Aquí había un río caudaloso, la única manera de cruzarlo era con ayuda de Xólotl. Si en vida no se había tratado bien a algún perro, el muerto se quedaba en esta dimensión por la eternidad.
2.- Tepectli Monamictlan: Lugar donde los cerros chocan entre si.
3.- Iztepetl: Cerro de navajas, erizado de pedernales.
4.- Izteecayan: Lugar en el que sopla el viento de navajas, ocho colinas donde nieva constantemente
5.- Paniecatacoyan: Aquí los cuerpos flotan como banderas, aquí empieza una zona desértica fría. 6.- Timiminaloayan: Sendero el cual se tiene que atravesar, sufriendo la acaecida de flechas lanzadas por manos invisibles.
7.- Teocoyocualloa: Lugar donde las fieras se alimentan de los corazones. En este pasaje, una fiera salvaje abría el pecho del difunto para comerle el corazón
8.- Izmictlan Apochcalolca: camino de niebla, en este lugar; done se tenían que atravesar nueve ríos.
9.- Chicunamictlan: Aquí las almas encontraban el descanso eterno.
El viaje que dura cuatro años culmina con la liberación del tonalli o alma.
La labor de dirigir el Mictlan residía en dos entes, uno masculino y otro femenino, en una fuerza dual: El rey Mictlantecuhtli, y la reina Mictecacíhuatl.
Nuevamente vemos la figura del perro en el infierno, pero esta vez no es ser atormentador como en las otras culturas, sino todo lo contrario, es un can que ayuda a las personas a alcanzar su descanso y su felicidad, no es un ente maligno. La más clara diferencia entre el infierno de Dante y el Mictlan es que en el segundo las personas tiene que pasar por todas las estancias, no hay círculos para determinados pecados, sino que todos tienen que recorrer todas las estancias y padecer las mismas pruebas antes de llegar al izmictlan, en este punto también se puede destacar el hecho de que todos están destinados a la salvación, sea la clase de persona que sea. La otra semejanza es el frío y la oscuridad antes que el fuego que reinan en este plano, un reiterativo que ya hemos observado en la cultura oriental y en la nórdica.
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